Distintos grupos que se han visto afectados por los más recientes bloqueos en la Mina Peñasquito, en Mazapil, Zacatecas, alzaron la voz y pidieron la intervención de los gobiernos municipal, estatal y federal para defender su derecho al trabajo.
Reunidos en la capital zacatecana, comerciantes, amas de casa, transportistas y profesionistas que se desempeñan en Mazapil asentaron que ya no quieren vivir en incertidumbre por el paro en la mina, que han perpetrado grupos de ejidatarios y de la empresa CAVA.
En conferencia de prensa, aproximadamente 30 representantes de distintos sectores de la región del semidesierto recalcaron que los bloqueos en Peñasquito ha afectado no sólo a Mazapil, sino también a todas las comunidades y lugares de Concepción del Oro, El Salvador, Nieves, Saltillo y de otros estados.
“Le pedimos al señor gobernador (Alejandro Tello Cristerna) que nos ayude, al alcalde (Gregorio Macías Zúñiga), al presidente de la República (Andrés Manuel López Obrador), que resuelva este grave problema, sólo queremos trabajar”, externó uno de los manifestantes.
Recordaron que antes de la llegada de la mina a Mazapil, en el municipio y la región no había oportunidades para sus habitantes: los jóvenes emigraban a otros estados en búsqueda de empleo, pagaban renta, agua, teléfono, luz eléctrica y, además, tenía que enviar dinero a sus familias.
Luego de la llegada de la mina, hace aproximadamente 10 años, en Mazapil y la región empezó a haber progreso en las comunidades, se construyeron escuelas, carreteras, restaurantes, hoteles, clínicas y hospitales.
Como consecuencia de esto, se abrieron infinidad de comercios y negocios para abastecer las necesidades de los más de 6 mil trabajadores de la mina, y ello se extendió a más de 20 mil personas que se ven beneficiadas indirectamente de la actividad extractiva.
Reiteraron que, con la llegada de la Mina Peñasquito, comenzó la actividad económica, comercial y social en Mazapil y los municipios circunvecinos, como Concepción del oro, El Salvador, Nieves, Villa de Cos, e incluso de municipios más alejados, como Guadalupe, Zacatecas, Fresnillo o Jerez.
“Queremos trabajo, si la mina se para, todo el semidesierto se para también. Somos mayoría, en las comunidades queremos que nos apoyen los gobiernos municipal, el estatal y el federal, porque con la mina se tienen muchos empleos, y de ellos nos beneficiamos todos”, remarcó Eleazar Ríos.
Eleazar Ríos externó que, como padre, como ciudadano y como comerciante, manifiesta su necesidad pedir la intervención de los gobiernos para que se defienda el trabajo, que ya no se cierre la mina y que resuelvan el conflicto que impera con ejidatarios y los transportistas de la empresa CAVA.
“Son muchas comunidades las beneficiadas, no sólo de Mazapil, sino de otros municipios y estados, estamos como el temor de que los proveedores ya no quieren venir porque son muchos los gastos para ellos; y los trabajadores, sin exagerar, se van con el semblante triste, llorando, a ver si hallan ‘ride’ para regresarse a Concepción del Oro o a sus lugares de origen”, manifestó.
Así como Eleazar Ríos se ha visto beneficiado con la actividad de la mina, otros más dijeron que en sus negocios y servicios de transporte brindan trabajo a más familias, y si la mina se detiene, se paraliza todo.
Erik Flores / Tropicozacatecas.com
SÍGUENOS EN FACEBOOK:
TRÓPICO DE CÁNCER NOTICIAS
